Tratamientos de desratización en Madrid ante el comportamiento y biología de ratas y ratones
El comportamiento de estos mamíferos es especial y estrictamente nocturno, apareciendo en pequeñas oquedades del terreno o paredes donde se sienten protegidos. Para conseguir que salgan y proceder a su fumigación, la desratización tiene que ser efectuada por profesionales.
Las sustancias anticoagulantes que se aplican a las ratas provocan hemorragias internas en el animal, lo que termina provocando su muerte. Dichas sustancias forman lo que se conoce como rodenticida y son ideales para minimizar el impacto ambiental de las ratas e incluso reducir el riesgo potencial que tiene sobre la salud de niños o mascotas.
A la hora de intervenir, hay que efectuar un pequeño estudio o diagnóstico donde conozcamos el número de ellas que existen y poder establecer un método de actuación donde los resultados sean un verdadero éxito.
Existen dos tipos de tratamientos de desratización: los pasivos y los activos. Los primeros hacen referencia a poner cebos que eviten la llegada del roedor a sus instalaciones, de modo que las condiciones ambientales de las mismas se mantengan inalteradas eliminando todos los posibles accesos que pudieran tener.
Por otro lado, los activos se aplican en casos muy extremos donde los ratones ya han logrado entrar en el local comercial o vivienda y hay que actuar de inmediato para hacerlos desaparecer.
Los métodos de actuación, a su vez, pueden ser físicos, químicos o biológicos:
- Físicos: Se utilizan trampas y ultrasonidos
- Químicos: Empleo de repelentes o productos de fumigación que sean respetuosos con el medio ambiente.
- Biológicos: Se recurre a bacterias u depredadores más grandes que las propias ratas para deshacernos de ellas.
En todo momento hay que advertir que dichos procedimientos tienen que ser efectuados por profesionales que saben lo que hacen, por su amplia experiencia y cualificación en el sector.
Recomendaciones de su empresa de desratización en Madrid
Todas las técnicas que desarrollen empresas como Pest System tienen como objetivo establecer un control de plagas, pero también se puede hacer un control indirecto por parte del cliente para que ninguna estructura o instalación, ya sea doméstica, sanitaria o cultural, se vea afectada por la proliferación de roedores.
Como consejos que les podemos proporcionar, se encontrarían entre ellos ordenar de forma adecuada el mobiliario para tapar roturas o agujeros que podrían ser aprovechados por los roedores para entrar, inspeccionar periódicamente el terreno o vegetación refiriéndonos a la industria agro-alimentaria y limpiar adecuadamente y dejar libre de basura las instalaciones.
Igualmente, cuando ya han conseguido entrar el único consejo que les podemos proporcionar es contactar cuanto antes con una empresa de desratización en Madrid cuyas actuaciones y productos le permitan ejercer un trabajo exhaustivo para eliminar a las ratas de sus instalaciones.
Su presencia está relacionada con enfermedades como la salmonelosis, meningitis, pulmonía, rabia y tuberculosis, por lo que el riesgo existe en cuanto veamos a una sola de ellas. Un simple excremento de una rata puede ya ser riesgo de infección, debido a lo cual un servicio profesional es la mejor solución.
Mantenemos el compromiso desde el primer día de ofrecer un servicio de alta calidad que se adapte a las necesidades de los clientes, basado en la adquisición de todos los medios y metodologías más avanzadas para asegurar que las soluciones son eficaces y estratégicas.
Ya sean medidas preventivas o correctivas, nuestros técnicos siempre logran que ni personas, animales o plantas se vean afectados por las mismas, aunque en ocasiones muy extremas en casos de alta complejidad nos vemos obligados al uso de biocidas tóxicos en la desratización.
Programa de control
Con el fin de controlar las plagas de ratones y ratas, en nuestra empresa de desratización de Madrid, hemos diseñado un plan de actuación, el cual consta de tres pasos fundamentales:
Inspección
Consiste en el estudio completo de la zona a tratar, determinando el grado de infección y la identificación correcta de la especie a combatir.
Tratamiento
El objetivo fundamental de esta fase es la reducción de la población de roedores a niveles aceptables para la salud humana.
Mantenimiento
En esta fase se establece una vigilancia permanente sobre cualquier aparición de focos de infección.
Los instintos de los roedores los hacen difíciles de controlar y, debido a ello, son una importante amenaza para su empresa, vivienda u establecimiento. La infestación de roedores es un problema y es peligroso para los seres humanos. Los roedores pueden provocar cortocircuitos al roer los cables de la corriente.
Los roedores se alimentan de las fuentes de alimentación humana y destruyen el cartón, papel, cajas y el plástico para construir sus nidos.
Los roedores son innatamente cautelosos con las medidas para su control como cebos y trampas, y colonizan madrigueras, áticos, terrazas, huecos de los muros y otros lugares difíciles de alcanzar.
El control de los roedores empieza con la prevención
Para prevenir que los roedores entren en su vivienda, todas las grietas, huecos, hendiduras y espacios más grandes que el tamaño de la tapa de un lapicero deben ser rellenados con virutas de acero.
Estos huecos deben ser tapados con masilla, cemento o yeso. Todos los posibles puntos de entrada como conductos de ventilación o alcantarillas deben ser sellados para prevenir la entrada de estos roedores.
Las ratas pueden entrar mediante un agujero tan pequeño como una pulgada, de forma que todos los huecos, incluyendo los más pequeños, deben ser sellados.
Con el fin de exterminar una población existente de roedores, la desratización debe también identificar y eliminar el lugar donde estos roedores se alimentan y anidan.